Cuando todos lo daban por renunciante al cargo de presidente de la petrolera estatal, por las marchas y contramarchas en el incremento de precios de los combustibles, el titular de Petroperú, Luis Rebolledo, sorprendió a todos asegurando que nunca presentó su renuncia.A fines de año, la empresa estatal estableció un incremento de precios de las gasolinas de 84 y 90 octanos, del diesel y los residuales, de cerca del 10%, y ante las críticas, el Gobierno dio medidas que llevaron a la petrolera a fijar un ajuste de solo 5%.Luego un medio de comunicación publicó que Rebolledo había concretado su renuncia, e incluso el ministro de Transportes, Enrique Cornejo, había señalado que su retiro no tenía que ver con el alza de los combustibles, sino que ello estaba previsto para que pudiera ocupar otros cargos.Pero ayer Rebolledo afirmó que "yo no he renunciado y nadie me ha pedido mi renuncia, no he recibido ninguna llamada de atención (por el alza de combustibles), todo lo contrario, he recibido apoyo".Defendiendo su decisión de ajustar los precios al máximo de lo que permitieron las bandas del Fondo de Estabilización de los Combustibles, añadió que "si me suben la banda y no ajusto los precios, sería un idiota", añadiendo que eso afectaría la economía de la empresa.
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