Los desafíos y emplazamientos quedaron atrás. Así como la guerra legal que había amenazado con emprender el Gobierno de promulgarse la norma. El Ejecutivo y el Gobierno Regional del Cusco limaron anoche asperezas y acordaron mantener la ordenanza que legaliza el cultivo de la hoja de coca en los valles de La Convención, Yanatile y Qosñitapa. De esta manera, el presidente regional Carlos Cuaresma, con el apoyo de su partido y aliado del Gobierno, el FIM, se salió con su gusto.Lo único que aceptó fue precisar la ordenanza promulgada ayer a través de un reglamento.El presidente del Consejo de Ministros, Carlos Ferrero, anunció esta solución luego de reunirse con el titular de la región cusqueña, con el presidente Alejandro Toledo y con los ejecutivos de Devida en Palacio de Gobierno.Según Ferrero, el presidente Toledo aceptó que en el reglamento se precise que el valle, y no los valles, de La Convención sea el beneficiado con esta norma. Además, aceptó que se oficialice la compra de Enaco a los productores cocaleros "que solo se encuentren inscritos en el padrón de esa empresa. Este es un problema de redacción que debería ser aclarado, y en parte se aclaró y se va a terminar de precisar en el reglamento", mencionó en tono conciliador.