El fuego en una refinería de la empresa Gulf, en Puerto Rico, cobró fuerza y paralizó la zona metropolitana con una densa, tóxica y enorme nube negra que podía verse desde largas distancias. El fuego, que comenzó a primera hora de ayer, se extendió a 16 de los 40 tanques de almacenamiento de combustible sin causar heridos graves.La petrolera que arde en llamas colinda con una base militar estadounidense. Por ello, el gobernador Luis Fortuño informó que conversó con funcionarios de la Casa Blanca y que se acordó decretar el estado de emergencia en el área donde se ubica la Caribbean Petroleum para poder recibir fondos de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias.