El Ministerio del Interior se ha apresurado en enviar un contingente policial a Cajamarca para prever desbordes. Los dirigentes de las comunidades han negado que vayan a realizar acciones de violencia, pero los empresarios mineros han insistido en pedir al Estado que imponga el orden y haga cumplir la ley.Cajamarca se prepara para una jornada que, según documentos de inteligencia, podría replicar lo ocurrido en Tintaya hace no más de un par de semanas. ¿Pero, hay motivos suficientes para pensar por adelantado que esto será así?El padre Marco Arana no quiere ser alarmista. Pero con la experiencia que le da el haberse desempeñado como mediador en muchos conflictos sociales desde 1993 -cuando era párroco de Porcón- ha advertido que debido a la existencia de algunos problemas aún no resueltos entre la minera Yanacocha y las comunidades de su zona de influencia, nada garantiza que no se pueda desbordar la gente convocada a participar en una marcha pacífica en la zona del cerro La Quinua.