El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) ha dado a conocer su plan de acción para mejorar el clima de negocios en el país. Se trata de una lista de tareas bastante ambiciosa, que se constituirá en todo un desafío para el Gobierno, en especial porque involucrará la participación de un número considerable de instituciones del Estado y del sector privado.El reto, que demandará del MEF una posición de liderazgo y concertación que no se ha visto en los ministros que han estado al frente de esta cartera, parece inmenso a primera vista, particularmente porque entre las instituciones cuyo papel será clave figuran algunas que no han mostrado un compromiso genuino para modernizarse y constituirse en actores del desarrollo del país: el Congreso, el Poder Judicial y los municipios.En el caso del Congreso, se requerirá la aprobación de leyes y modificaciones a la legislación, por ejemplo, del Código Procesal Civil, a fin de agilizar trámites de procedimientos judiciales. En tanto, el Poder Judicial tendrá que poner en marcha la modernización de los juzgados comerciales, lo que requerirá la capacitación de magistrados y la contratación de personal especializado. Para los municipios, el MEF plantea un programa de modernización que apunta al crecimiento y desarrollo sostenible de las economías locales a través de la autosostenibilidad financiera y la mejora de resultados.También se contempla la implementación de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), una tarea en la que el sector público se encuentra todavía en pañales, salvo muy pocas excepciones, como es el caso de la Sunat, aunque deberá continuar simplificando y actualizando sus procesos. Llama la atención que entre las instituciones consideradas por el MEF no figuren las universidades -las que se preocupan por la calidad de la enseñanza que imparten, lógicamente- ya que sus investigaciones y conocimientos podrían ser de gran utilidad en aspectos como las TIC.Además, el plan estratégico del MEF requerirá del compromiso del presidente García, de quien se espera el respaldo pertinente y su concurso para impulsar la implementación en las instituciones consideradas poco preparadas para asumir su responsabilidad con el desarrollo del país.
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