VIAJE A PALESTINA ESTUVO ESTABLECIDO DESDE EL INICIO

Tras la kilométrica enumeración de logros en el periplo, el mandatario se vio confrontado con el primer tema álgido: la suspensión de la visita a territorio palestino. "Hicimos todos los intentos para encontrarnos (con Mahmud Abbas) el 30 o 31 de mayo, pero él tuvo que ir a Canadá; exploramos entonces la posibilidad de reunirnos a mi regreso de China, pero políticas internas de Palestina y del Perú obligaron a que ambos líderes concordaran la necesidad de postergar el encuentro y les adelanto que (Abbas) ya aceptó feliz una invitación para visitar el Perú", enfatizó. Llama la atención tal explicación, ya que según la agenda --publicada dos veces por este Diario y nunca desmentida-- estaba claro que Toledo salía de China de vuelta al Medio Oriente el lunes 6. Además, el hecho de que el representante palestino en el Perú, Walid Ibrahim, hubiese viajado a su tierra en tal fecha para recibir a la comitiva nacional, es una muestra de que la cancelación de la escala fue ciertamente sorpresiva. Toledo descartó que este 'impasse' provoque una marcha atrás en los países árabes para apoyar la candidatura peruana para ocupar un asiento no permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU.