El ministro Pedro Pablo Kuczynski debe estar saltando en un pie, aunque sin saber cuánto le durará la alegría. Luego de tensos días por las presiones para ampliar aun más el presupuesto de este año y el enfrentamiento que ello conllevó con el primer vicepresidente, David Waisman, ayer conoció la noticia de que todos los países que recibieron la propuesta peruana para recomprar su deuda en el Club de París aceptaron participar en la operación. Según información a la que pudo acceder El Comercio, EE.UU. habría sido el único que no aceptó completamente la oferta de recompra hecha por el Perú. Todos los demás dijeron que sí y por el monto planteado. De esta manera, de los casi US$2.000 millones que el Gobierno del Perú propuso recomprar, finalmente se lograron comprometer unos US$1.800 millones, es decir, el 90% del objetivo inicial. En el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) calculan que la operación permitirá un ahorro anual estimado del orden de los US$350 millones por las amortizaciones que se dejarán de pagar en los próximos años.