No es un llamado cualquiera. El gran potencial minero del Perú corre el riesgo de no ser explotado porque una minoría de afiebrados busca obtener dividendos políticos y otros cuantos poderosos narcotraficantes intentan ampliar su lavandería aurífera, y encima están sueltos en plaza sin que el Estado y la clase política reaccionen. Lo advertimos reiteradamente desde hace buen tiempo. Aquí falta inteligencia, audacia y cojones para gobernar el país. El Perú nunca ha tenido un buen presidente acorde a sus retos y exigencias, y lamentablemente tampoco lo va a tener en los próximos cinco años de gobierno. Y es que los candidatos que figuran en las encuestas son igual o peor que los presidentes que nos han antecedido.Duela a quien le duela, nuestra clase dirigencial nunca ha sabido defender lo nuestro. La historia del Perú está llena de vergonzosas claudicaciones, de batallas y guerras perdidas, de ayudas a invasiones sangrientas y otras ignominias.Por ello es importante y urgente una revolución educativa que forme nuevas generaciones con las aptitudes de liderazgo, emprendimiento y visión que nunca tuvieron nuestros seudodirigentes. Dedíquele todo su tiempo a este tema, señor García, en lo que le resta de su mandato. Y quien lo siga el 2011, que se dedique a profundizar y maximizar esa revolución y llegue a los rincones más alejados del Perú. Recién allí moriré pensando que nuestros nietos por fin harán lo que hoy nadie se atreve a defender, señala el periodista José Luis Patiño.