La noche del último miércoles 25 no será olvidada por los trabajadores de la mina Tintaya, en Espinar, Cusco. ¿Por qué? La policía detectó, según palabras del congresista de Perú Posible José Taco Llave, "documentos y panfletos, donde Sendero Luminoso está llamando a la insurgencia y a la revolución".Este acontecimiento demoró el inicio de las negociaciones entre los pobladores y una comisión gubernamental presidida por el recientemente nombrado viceministro de Minas, Rómulo Mucho Mamani.Recordemos que Tintaya es propiedad de la empresa anglo-australiana BHP Billiton y es la tercera productora de cobre del país; anualmente produce 90 mil toneladas de cobre concentrado.Ante este escenario, la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE) expresó su total repudio al ambiente de violencia y la falta de garantías que llevó a la empresa minera a paralizar sus actividades y evacue a sus trabajadores a fin de cautelar su integridad física. El gremio mineroenergético invocó a los peruanos a repudiar los hechos de violencia y pidió "estar alertas frente a las acciones violentistas que buscan sabotear la inversión privada y quebrantar el sistema democrático".
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