Si usted invierte en la Bolsa de Valores de Lima y una Sociedad Agente de Bolsa (SAB) le juega sucio, su dinero podría perderse para siempre, pues el fondo de garantía que sirve para resarcir a los inversionistas en esos casos, cada vez tiene menos dinero disponible, es muy rígido y de difícil acceso. Según el balance general de la institución bursátil, a diciembre del 2004, el patrimonio del fondo ascendía a S/.20,7 millones con los cuales se supone debe hacer frente a las "faltas al mercado" que puedan cometer las SAB. Pero el reglamento de aplicación es bastante preciso: solo se usará el 30% del fondo por reclamos a una misma sociedad y solo se atenderá US$3.000 por inversionista.Si el monto del daño es mayor, mala suerte, nadie responderá por su dinero salvo los dueños de la SAB, pero para ello habría que recurrir al Poder Judicial.(Edición sábado).