La posibilidad de que el Perú sea escenario de una guerra armada de la coca debido a que las mafias del narcotráfico están dotando de armas a los campesinos para defender sus plantaciones es "previsible", según el ex zar antidrogas Ricardo Vega Llona.Afirmó que cuando ocupó el cargo, en el 2002, la oficina de Contradrogas, a su cargo, "previó" que un fenómeno "violento" de tal envergadura podía ocurrir, pues se identificó en algunos valles el abastecimiento de armamento."Teníamos ya serias presunciones de esta actividad en casi todas las zonas cocaleras, pero básicamente en el valle del Monzón. El narcotráfico buscaba meterle armas a los campesinos, auspiciar paros, radicalizar la discusión, siempre busca jaquear al país", señaló a La Primera.Para Vega Llona, las eventuales alianzas entre el narcotráfico, el terrorismo y los cocaleros avanzan porque no hay "verdadera decisión de Estado" para atacar el problema de raíz, a través de las instituciones especializadas.