Tal como adelantábamos el viernes pasado, uno de los puntos más controversiales del acuerdo adoptado entre el Ministerio de Energía y el consorcio Camisea para disponer de mayor gas para el mercado interno es el precio al que se venderá el recurso proveniente del lote 57.Las empresas generadoras que han estado en la cola esperando que se reabrá la atención ya han mostrado signos de desacuerdo, más aún cuando se menciona que dos proyectos de generación eléctrica podrían copar el gas adicional que se dispondrá del lote 88.Y esto para no mencionar la suspicacia que se ha generado acerca de que no hubo negociación sino que el Ministerio de Energía y Minas aceptó las propuestas del consorcio.Por eso, es conveniente que se publiquen la agenda y las actas de las reuniones de la negociación, para evitar que quienes buscan que se patee el tablero no encuentren asidero. Además, el MEM debe dejar de dar la información a cuentagotas, en aras de una mayor transparencia,señala Julio Lira Segura, director del diario Gestión.
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