Tras llegar a un acuerdo con representantes de la empresa, unas 25 personas que invadieron la minera Antamina abandonaron sus instalaciones.Los invasores, todos miembros de una misma familia, ingresaron a las 06.00 horas del viernes al campamento minero para exigir ser contratados por la compañía. Luego de conversar con funcionarios de la minera abandonaron el lugar.Sin embargo, ese mismo día por la tarde, 15 personas pertenecientes a tres familias invadieron los terrenos de Antamina pero no lograron ningún diálogo, por lo que fue necesaria la intervención de la Policía para retirarlas. Al día siguiente volvieron a ingresar de modo ilegal al campamento minero y fueron detenidas por agentes del orden. En total se intervino a ocho varones y cuatro mujeres, los que fueron puestos a disposición de la comisaría de Yanacancha.