La decisión del Ejecutivo tuvo una respuesta inmediata en el Parlamento, que cerró filas para defender la autógrafa de ley, que fue aprobada por unanimidad en la Comisión Permanente. Fredy Otárola, presidente de la Comisión de Seguridad Social, calificó como alarmistas las observaciones del Ejecutivo y anunció que planteará a su grupo de trabajo la insistencia en el proyecto. Por su parte, Víctor Mayorga, ex presidente de esta comisión, opinó que el gobierno muestra una vez más una política antisocial y enfatizó que la norma no le va a significar ninguna descapitalización ni al Estado ni a la AFP, pues se trata de un dinero que les pertenece a los trabajadores.