Suspendidos temporalmente los mecanismos de diálogo entre el Perú y Chile a raíz de las disculpas públicas exigidas por un lado y no concedidas por el otro, la futurología parece haberse convertido en la actividad de moda. Pero del tono incierto expresado anteayer por el primer ministro Carlos Ferrero ("sinceramente, no sé qué ocurrirá en el futuro") se pasó ayer al presagio apocalíptico del ex ministro chileno Edmundo Pérez Yoma: "Estamos frente a un problema muy difícil , pero creo que lo peor está por venir". ¿Alguna respuesta oficial? Pues en la cancillería peruana hay la intención de no exagerar más el tema ni de continuar el juego de réplicas y dúplicas, sino más bien de retomar lo poco que se avanzó hace mes y medio en Marruecos entre los cancilleres Manuel Rodríguez e Ignacio Walker, "con conversaciones y coordinaciones adecuadas", según fuentes consultadas.