El presidente boliviano, Carlos Mesa, demora la promulgación de la controversial Ley de Hidrocarburos que fue aprobada el jueves pasado por el Congreso. Esta situación así como las herméticas reuniones que mantiene con sus colaboradores, han puesto en duda el viaje del mandatario a la cumbre árabe-sudamericana, que comenzó ayer en Brasilia. Su viaje estaba previsto el domingo en la tarde.La decisión estaría tardando, pues en marzo de este año, el gobierno de Mesa se comprometió con el Fondo Monetario Internacional (FMI) a respetar los contratos de inversión extranjera, compromiso que ahora complica el futuro de la Ley de Hidrocarburos. El domingo, Mesa se reunió con su gabinete y se conoció que este ha quedado dividido en posturas de apoyo y rechazo a la promulgación de la ley.