La solución al problema en que se encuentra el complejo metalúrgico de Doe Run Perú está cada vez más lejos, pues el gobierno habría recapacitado en su posición inicial de ampliar hasta en cinco años el programa de Adecuación y Manejo Ambiental (PAMA). Además ayer el mediador de los trabajadores, el congresista Jorge del Castillo, desisitó de seguir con este encargo, pues la empresa con matriz en EEUU habría cambiado su postura inicial y ahora no tendría la intención de entregar sus acciones al Estado en garantía.