El ex primer ministro y actual congresista Jorge Del Castillo indicó que ya se ha delineado una solución para que la minera Doe Run Perú vuelva a operar, pero dependerá de que la empresa -propietaria del Complejo Metalúrgico de La Oroya- cumpla varias exigencias. Del Castillo actúa como mediador entre la minera, los trabajadores y los proveedores de concentrados de Doe Run. El congresista explicó que la minera deberá capitalizar una deuda de US$156 millones que tiene con su único accionista, Ira Rennert. Además, el accionista deberá aportar capital fresco (mínimo de US$73 millones) para asegurar el cumplimiento del Programa de Adecuación y Manejo Ambiental (PAMA), que reducirá la contaminación en la ciudad de La Oroya y cuyo plazo de ejecución vence en octubre.Asimismo, indicó que la minera deberá otorgar en prenda la totalidad de sus acciones como garantía ante el Gobierno que culminará el PAMA. "Doe Run tiene que rendirse si quiere salvarse", sostuvo.