Nuevamente se discute ampliar los destinos del canon para financiar gastos en el sector Defensa y nuevamente pensamos que la problemática de este sector es solo de recursos y no dedicamos tiempo a buscar soluciones de largo plazo. Y es que muchas veces en el sector público tenemos la errónea idea de que para que alguna política pública se lleve adelante exitosamente se deben aprobar algunas cuantas leyes y se tiene que dar más recursos. La propuesta de destinar parte del canon a las Fuerzas Armadas va en contra de la lógica implementada en el manejo presupuestario en la última década que busca evitar que se predetermine un ingreso para un fin específico. Si todas las prioridades nacionales tuvieran un ingreso predeterminado, el sistema de caja única del Tesoro Nacional no habría funcionado, los desequilibrios presupuestales serían gigantes y hoy no seríamos admirados internacionalmente por nuestro equilibrio macroeconómico. Ya el destino actual del canon crea problemas de inequidad entre regiones por lo que valdría la pena analizar y discutir si el sistema del canon ha sido eficiente para compensar a las regiones por el uso de recursos no renovables y si este ha tenido el mejor impacto en la población. También es momento de pensar qué pasará cuando el Impuesto a la Renta disminuya en alguna zona y los recursos a distribuir también se reduzcan. Quizás sea momento de crear un Fondo de Estabilización del Canon que permita reducir su volatilidad y crear un sistema para que se pueda premiar a aquellos municipios o regiones que utilizan estos recursos adecuadamente y no caen en la tentación de hacer monumentos, estadios o plazas sin ninguna lógica de desarrollo, señala el ex ministro de Economía, Fernando Zavala.