EL ORO QUE NO HIZO RICO A UN PUEBLO
20 de abril de 2009

En Huepetuhe, un pueblo de muy difícil acceso en la todavía enmarañada selva de Madre de Dios, se cumple con amarga exactitud lo que dijera Raimondi del Perú: "es un mendigo sentado en un banco de oro". Tanto lo es que el oro extraído informalmente oscila cada año entre US$ 250 millones y US$300 millones. Pero nada de esta riqueza ha mejorado la vida de sus 10 mil habitantes. Como el mercurio que los envenena, se ha ido a otros bolsillos y solo les ha dejado una tierra de muerte. Hay tres formas de entender lo que pasa en Huepetuhe.