Incredulidad y desazón genera el anuncio de una nueva prórroga (la quinta) para que Doe Run Perú (DPR), operadora del complejo metalúrgico en La Oroya, cumpla con el Programa de Adecuación y Manejo Ambiental (PAMA), el cual vence el 31 de octubre de este año. Especialistas consultados por La República consideraron que el gobierno demuestra flexibilidad y envía un pésimo mensaje para aquellas empresas que sí cumplieron con su PAMA. Además expresaron sus reservas acerca de que DRP cumpla con su compromiso. (Edición domingo)