La semana pasada se supo que Doe Run anda en una delicada situación, luego de que esté a punto de vencérsele el crédito revolvente de US$ 75 millones, de parte de un grupo de bancos. Es más, hasta se habló de que el Gobierno salvaría a esta compañía, a través de Cofide.Según su portavoz, Víctor Andrés Belaunde, la empresa conversa con bancos y empresas mineras proveedoras para solucionar "problemas coyunturales".El presidente de la Federación de Trabajadores Mineros y Metalúrgicos del Perú, Luis Pablo Castillo, indicó que los trabajadores y personal de Doe Run están solicitando reunirse con la alta gerencia de la empresa, a fin de conocer su situación financiera y encontrar una solución.El dirigente manifestó su sorpresa por la fluctuación financiera que ha tenido Doe Run desde el tercer trimestre del 2008, y precisó que las utilidades de ese periodo fueron por US$ 130 millones y a la fecha no cuentan con resultados positivos.Las cifras tampoco acompañan a Doe Run. Las proyecciones preliminares de Aduanas revelan que, desde enero hasta la primera semana de marzo, las exportaciones de metales refinados de Doe Run habrían alcanzado los US$ 127.49 millones, 41% menos con respecto al mismo periodo del año pasado.