Ahora que el Banco Central anunció un 4% de crecimiento para enero del 2009, muchos se preguntan si el Plan de Estímulo Económico que a regañadientes evacuó el Mago Valdivieso, y que sólo se ha podido implementar con el reestreno de Luis Carranza como ministro de Economía, no habrá llegado demasiado tarde.Desde noviembre del año pasado la desaceleración del crecimiento se hace más evidente y surgen dudas de que se pueda alcanzar el 5% prometido para este año.En noviembre y diciembre hubo, prácticamente, un estancamiento del comercio mundial, que evidentemente nos ha afectado. También hubo una fuerte caída en la inversión pública, pero eso se debe revertir a partir de marzo para adelante. A nivel interno seguimos observando buen comportamiento en los despachos de cemento. En líneas generales estamos en una tendencia que nos permite asegurar que superaremos el 5%.El gobierno ha gestionado muchas líneas de crédito contingentes para enfrentar cualquier problema de liquidez, pero muchos bancos no están descontando letras u otorgando financiamiento con las mismas facilidades que antes de la crisis, y ello podría ocasionar un rompimiento de la cadena de pagos.Que quede bien claro que no vamos a permitir que se repita lo ocurrido en 1998. En otras partes del mundo, los bancos se han visto afectados patrimonialmente, porque activos que creían que valían como cien han terminado valiendo diez o menos y eso disparó la tasa de interés interbancaria. Lo que ha venido ocurriendo en el Perú, es que algunos banqueros han comenzado a percibir mayor riesgo crediticio en ciertos sectores y tienen un comportamiento más cauteloso. Para combatir eso hemos tratado de lanzar instrumentos que reduzcan ese aumento en el riesgo percibido. ¿Cómo? Ampliando el Sepymex y el Fogem que son fondos de seguros para las exportaciones. (Edición domingo).