El anuncio de yanacocha, en noviembre del año pasado, de retrasar el desarrollo de su gigantesco proyecto Minas Conga (que demanda una inversión de US$ 1,500 millones), dio el campanazo de alerta acerca del real impacto de la crisis internacional en el Perú. Hasta este momento , la turbulencia global había afectado a las mineras junior (empresas pequeñas) y paralizado inversiones por cerca de US$ 200 millones. Hoy, tres meses después y pese al optimismo del gobierno, la incertidumbre sobre el futuro de la crisis ha llevado a las empresas mineras que operan en el Perú a revaluar el 100% de sus proyectos de inversión para los próximos años. (Edición domingo).