La ciudad enfrenta cada vez más restricciones para abastecerse de gas natural, ahora no solo por la falta de capacidad para transportarlo desde Camisea, sino también por la incertidumbre de cuántas reservas de gas tenemos. Por tal razón, el Congreso prevé dar prioridad al debate de un proyecto para obligar al uso eficiente de ese combustible por parte de los mayores consumidores: las plantas generadoras.Ya el Gobierno había dado una norma que busca incentivar que las empresas que operan diversas centrales termoeléctricas que consumen ese combustible, inviertan en mejorar su tecnología para producir más electricidad usando menos gas.Las térmicas a gas que se han instalado en Lima desde que llegó el gas de Camisea en el año 2004, operan bajo el sistema denominado ciclo simple, que pierde en el ambiente parte del combustible y no permite utilizarlo al máximo, y frente a lo cual, mediante la norma antes citada, se buscaba convertir las citadas plantas al sistema de ciclo combinado, que permite reciclar el gas perdido y aumentar la potencia al máximo, ahorrando en el consumo.No obstante, hasta ahora solo la empresa Edegel ha convertido su planta generadora situada en Ventanilla, de ciclo simple a combinado, y todavía queda en manos de las demás empresas, el decidir si mejoran o no su tecnología. Frente a esta situación, el presidente de la Comisión de Energía del Congreso, Rolando Reátegui, informó que ni bien se reanude la labor legislativa ordinaria, le dará prioridad al debate de un proyecto que acaba de presentar la bancada fujimorista, y que declara prohibida la instalación de plantas termoeléctricas que usen gas natural bajo la tecnología de ciclo simple, así como niega dar autorización a la ampliación o renovación de plantas que solo usen este sistema menos eficiente.