El caso de la transferencia de Petro-Tech -por 900 millones de dólares- tuvo ayer otro giro. Desde Olmos (Piura) el presidente Alan García Pérez aseveró que cuando el 23 de enero se reunió en Palacio de Gobierno con los embajadores de Corea, Byung Kil Han, y de Colombia, Álvaro Pava, además del ministro de Energía de ese país, "les dije que no le parecía al Gobierno del Perú muy conveniente (esta venta) y que resultaba hasta extraña y sospechosa".Ello a propósito de la reciente transferencia de Petro-Tech a las estatales Ecopetrol, de Colombia, y Korea National Oil Corporation (KNOC), de Corea del Sur.Incluso, García recordó que mencionó a sus interlocutores que Osinergmin multó varias veces a Petro-Tech y que si esta empresa es hallada responsable en el caso de las interceptaciones telefónicas, "los nuevos propietarios serían considerados tercer civilmente responsables y pagarán por daños y perjuicios al Estado y a los agraviados. Más adelante tendrá que analizarse el tema de los contratos por los lotes adjudicados a Petro-Tech y sus antiguos propietarios. Me interesa que el Congreso analice en su conjunto este tema para ver desde el origen la relación extraña que tuvieron los dueños y miembros de la empresa privada Petro-Tech con Petro-Perú y Perú-Petro".