Con el uso de bombas lacrimógenas, unos 200 policías desalojaron ayer a las casi mil familias que, desde hace un mes, habían invadido un terreno de propiedad de la empresa minera Shougang Hierro-Perú.El desalojo se produjo en la madrugada y causó gran resistencia entre los pobladores, quienes arrojaron objetos contundentes para evitar que la Policía destruyera sus precarias viviendas. Esta medida se cumplió luego de que la compañía minera lograra un fallo a su favor en el Juzgado Mixto de Vista Alegre. Sin embargo, el dispositivo ha sido apelado por los invasores, quienes argumentan que Shougang no ha acreditado la propiedad de los terrenos. Ante la controversia, se formó una comisión, presidida por la alcaldesa de Marcona, Leticia Ramírez, para encontrar una salida pacífica a la disputa.