El Gobierno de Bolivia puso en marcha una amplia auditoría en YPFB, dos días después de relevar al presidente de la petrolera estatal por un caso de presunta corrupción. Investigadores acompañados por notarios y policías tomaron control de la oficina central de YPFB en La Paz y de sus delegaciones en el resto del país, en el inicio de una investigación ordenada por el presidente Evo Morales. "Iniciamos una auditoría jurídica, administrativa y técnica por una determinación del presidente", declaró la viceministra de Transparencia.