"Esto es lo de siempre, nunca trasladan al público toda la reducción, sino que se quedan con una diferencia, que de céntimos en céntimos se convierte en miles de soles", se quejaba Jaime Vásquez, conductor de un microbús de transporte público, al ver que el grifo donde se abastece de combustible no había reducido sus precios en S/. 1.50, tal como lo anunció el gobierno.Y es que, a pesar de que las refinerías rebajaron el precio de las distintas gasolinas en S/. 1.50 por galón, los grifos solo trasladaron al público una rebaja de entre S/. 1 y S/. 1.40 -dependiendo de la gasolina y del distrito donde está el grifo-, según pudo comprobar La República en un recorrido por las distintas estaciones de servicio de la capital. José Verdi, presidente de la Asociación de Grifos y Estaciones de Servicios del Perú (Agesp), refirió que no se puede obligar a cada grifo a bajar sus precios. "Cada uno tiene un costo operativo diferente, es muy difícil que todos bajen por igual. Dentro del marco de libertad de precios cada grifo hace la reducción que cree conveniente", indicó.