Excelente noticia para todo el mundo, menos para el consumidor local. Así se podría definir la caída continua experimentada en el precio del petróleo desde julio último, más contundente en la última semana, pero que en el Perú, para burla de los peruanos, no se traslada al precio final.Para Aurelio Ochoa, especialista en temas de hidrocarburos, el gobierno debe tomar una medida urgente porque esta situación daña la credibilidad del modelo económico aplicado en el país.Ochoa consideró que el gobierno envía un mensaje contradictorio cuando por un lado pide al empresario continuar arriesgando e invertir en el país para enfrentar la crisis internacional y por el otro, el Ministerio de Economía y Finanzas y el de Energía y Minas no hacen nada para sincerar el precio de los combustibles en el mercado interno. (Edición domingo).