Uno de los mayores riesgos que en la actualidad enfrenta nuestra economía es la caída de los precios internacionales de las materias primas, sobre todo de los minerales, por los efectos inmediatos que ello tiene en los ingresos fiscales y en la balanza comercial externa.En cuanto al primer efecto, por lo pronto la recaudación del Impuesto a la Renta de empresas ya empezó a caer (en octubre cayó 8.2%) debido, principalmente, al efecto negativo de la caída de los precios de los minerales en las utilidades mineras.¿Pero, hasta dónde podría soportar el Perú una caída de los precios de los minerales? Las exportaciones mineras representan alrededor del 60% del total de nuestras exportaciones.En sus últimas proyecciones, el BCR estima, tomando un cálculo del FMI, que una caída de 35% en las cotizaciones de las materias primas, tendría un efecto negativo en nuestros ingresos fiscales equivalente a 1.7% del PBI.Durante la primera presentación del Gabinete Ministerial ante el pleno en el Congreso, el ministro de Economía, Luis Valdivieso, ratificó esta proyección para el 2009 (superávit fiscal de 1.1% del PBI), siempre bajo el supuesto de una caída del 35% de los precios de los commodities.Recientemente ha explicado que como el MEF había programado un superávit fiscal de 2.3% del PBI para el 2009 (en el MMM de mayo), con una caída de 35% de los precios de los minerales, de manera sostenida, "podríamos seguir gastando lo mismo (el gasto presupuestado para el 2009 en el proyecto del Ejecutivo que se debate en el Congreso), pero ahorrando menos (1.1% del PBI)".Es más, Valdivieso afirma que podemos soportar una caída aún más drástica de los precios de los minerales."Imaginemos que esos precios caen en 50% y se acaban todos nuestros ahorros potenciales, (aún así) seguiremos gastando porque estaremos en posibilidad de gastar nuestros ahorros pasados, y ahí comienza el verdadero estímulo fiscal", remarcó, al hacer referencia al Fondo de Estabilización Fiscal (FEF) cuyos recursos ya suman US$ 1,800 millones (2.5% del PBI).