La propuesta es clara: si los dirigentes de la huelga indefinida en Tacna levantan su medida de fuerza, una comisión del Ejecutivo se trasladará a la región para iniciar un diálogo con sus autoridades y los representantes de la sociedad civil. En diálogo con El Comercio, Juan Manuel Figueroa, secretario de coordinación de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), explicó que si en el transcurso del fin de semana los dirigentes tacneños toman esta decisión, el lunes mismo podrían iniciarse las conversaciones. Por lo pronto, quien se ofreció como mediador entre las partes fue el obispo tacneño, Marco Antonio Cortez, quien espera una respuesta del titular de la PCM, Yehude Simon. Cortez convocó a los habitantes de Tacna a una misa por la paz, que se realizará el domingo.