Pedro Sánchez adelantó que para ese propósito podrían aplicarse medidas fiscales (impuestos) o ir hacia un tipo de negociación, para incentivar la generación hidroeléctrica. Como un padre preocupado que regresa de un largo viaje para restablecer la salud del hijo. Así llegó al país, desde Washington, el flamante ministro de Energía y Minas, Pedro Sánchez, al observar que en el Perú el precio barato del gas natural ha incentivado la generación eléctrica con este combustible (generación termoeléctrica), en desmedro de la inversión en proyectos de generación hidroeléctrica, de la cual fue su promotor en los noventa. "Una cosa que a mí me preocupa, y por la manera de cómo se ha venido dando ahora, es el precio del gas para el mercado interno. Con los precios actuales (del gas), el desarrollo de la hidroenergía, que debería ser nuestra primera fuente de energía, no es competitivo", manifestó Sánchez a CPN Radio.
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