Solo es cuestión de tiempo. El escándalo de corrupción que salpicó al gobierno todavía tiene otros capítulos por delante. Alberto Químper Herrera ha dicho a sus colegas abogados que lo han visitado en la celda de la División de Requisitorias -que el veterano letrado comparte con un delincuente común- que espera pacientemente la oportunidad para contraatacar y revelar la identidad de quienes están detrás de las grabaciones que expusieron su participación en un esquema para favorecer a la petrolera noruega Discover Petroleum. La República pudo obtener un registro de las declaraciones del ex miembro del directorio de la empresa estatal Perupetro.Para Químper, ex candidato al Congreso por el APRA en 2001 y conocido propietario de caballos de carrera, el cerebro diabólico de la difusión de los audios es el empresario dominicano Rafael Fortunato Canaán Fernández."Rómulo es muy alocado. Es todista, todo quiere para él. Entonces, el asunto empezó a caminar bien y se hizo el concurso. Rómulo se metió en Petroperú, ese fue el trabajo de Rómulo", dijo Químper.(Edición domingo).