Cuando los relojes todavía no daban las 12 del día, el jefe del Gabinete, Carlos Ferrero, acompañado por cinco ministros, dio su veredicto en Palacio de Gobierno: "El paro es un fracaso".Su argumento fue que como el paro consiste en que no trabajen los que tienen trabajo y como los que tienen trabajo han ido a trabajar, el paro no ha tenido éxito. Sin embargo, calló que el Gobierno había declarado ilegal el paro."Está por salir una filmación extraordinaria de impacto internacional donde se ve la actitud de miembros del Partido Aprista frente a la Casa del Pueblo incendiando llantas en la vía pública. Eso merece una investigación muy severa y estoy seguro de que la prensa libre no va a dejar pasar una cosa como esa. Va a causar un gran impacto el ver cómo desde el local del Partido Aprista se promueve el desorden", dijo Ferrero.Pero fue distinta su reacción tras escuchar a Ferrero y enterarse de que el oficialismo estaba por mostrar las irrefutables imágenes a la prensa en el Congreso .Ante esto, García replicó lo que él llamó "infundios" de Ferrero, a quien acusó de carecer de autoridad moral y le pidió su renuncia, así como la de todo su Gabinete. "Deben irse, porque el país exige cambios y así lo han dicho millones de ciudadanos hoy desde las 6 de la mañana", dijo exaltado.