JEFE DE INTELIGENCIA PIDE ESTABILIDAD Y NO DEPENDER DE VISTO BUENO LEGISLATIVO
28 de marzo de 2005

Varios meses han pasado, pero tanta batahola sobre las firmas falsas y otros escándalos con similar tinte han favorecido que pasen desapercibidas las promesas, los interinatos, las comisiones especiales, las propuestas y las prioridades. Lo que sí permanecen son la desazón y la reestructuración en las que está inmerso el Consejo Nacional de Inteligencia (CNI). Qué duda cabe que un gran paso para darle estabilidad es que la Comisión de Defensa del Congreso, primero, y el pleno de ese poder estatal, después, aprueben una nueva ley para el sistema de inteligencia, propuesta que el Ejecutivo formalizó el pasado 5 de noviembre y a la que se han sumado iniciativas de distinta autoría partidaria. En ese afán son varias las comunicaciones que se han cursado a diferentes autoridades para que expresen su punto de vista sobre los posibles cambios que ayudarían a que el Perú se fortalezca con una mejor inteligencia. Pero sin duda entre las misivas más esperadas estaba la del contralmirante AP (r) Julio Raygada García, actual jefe interino del CNI y que ha mantenido esa condición oscilante un calendario completo. ¡Ah, sí! Porque debemos recordar que fue el 26 de marzo del 2004 cuando a Raygada se lo nombró administrador temporal del organismo luego de una serie de denuncias que motivaron las caídas sucesivas de Daniel Mora y Ricardo Arboccó. Desde entonces una comisión multidisciplinaria concentró la atención, pues se le encargó dilucidar posibles innovaciones y reformas para la inteligencia. Luego de cinco meses la comisión presentó su informe y a Raygada se le encargó la jefatura interina, aunque la reestructuración en buena cuenta continúa.