Cual mentor en defensa de su pupilo, el presidente Alan García salió ayer a resguardar la permanencia de su ministro de Salud, Hernán Garrido Lecca, ante los insistentes pedidos para que deje el gabinete. No creo que sea dable negociar la salida de nadie porque, de igual manera, el ministro de Salud podría plantear que renuncien los dirigentes de la Federación Médica. Cuando alguien dice "No discuto con este porque es un don nadie", se está convirtiendo en don ninguno, sostuvo.