Obligados por las críticas que les llegaron de todas partes de Junín, las autoridades de La Oroya suspendieron el paro de 48 horas que habían programado para los días de Semana Santa. Por la ubicación que tiene la ciudad metalúrgica, ese paro habría perjudicado la comunicación entre la costa y Huancayo, Huancavelica, Ayacucho, Tarma, La Merced (Chanchamayo), Satipo y toda la selva central. El paso a Pasco, Huánuco, Tingo María y Pucallpa también habría sido imposible. La medida iba a realizarse en rechazo al gobierno regional de Junín y al Arzobispado de Huancayo, que promueven un plan de descontaminación de La Oroya y del río Mantaro, pero cuidando la estabilidad de los trabajadores de Doe Run.(Edición sábado).