El entusiasmo es relativo. El pedido de acelerar la desgravación comercial bilateral hecho por el presidente Alan García en Sao Paulo durante la Expo-Perú 2008 fue recibido sin mucho entusiasmo por ÁDEX, que considera de suma importancia que el Gobierno negocie en paralelo la eliminación de las trabas paraarancelarias que impone Brasil a nuestros productos.El Perú y Brasil firmaron hace cuatro años el Acuerdo de Complementación Económica (ACE) 58, que programa una desgravación paulatina que comenzó el 2005 y concluirá el 2019.A decir de José Luis Silva, presidente de la Asociación de Exportadores, el balance comercial con Brasil está en rojo (- US$947 millones) y se debe a que "el mercado brasileño está prácticamente cerrado a nuestras exportaciones. La relación comercial es totalmente asimétrica, no es justa", sostuvo.(Edición sábado).