Dicen los conocedores que se veía venir. Pero aun así, no dejó de sorprender la inversión anunciada ayer por el grupo Gerdau: 1.400 millones de dólares para modernizar y multiplicar por seis la producción de la planta de Sider-Perú, que adquirió en Chimbote en el 2006.Así lo hizo saber el director presidente del grupo, André Gerdau Johannpeter, quien se reunió con el presidente Alan García en Palacio de Gobierno. A la cita también asistieron el embajador de Brasil en el país, Jorge d"Escragnolle Taunay Filho, y el director ejecutivo de Sider-Perú, Luiz Polacchini, así como otros ejecutivos del grupo. Pasar de producir 450.000 toneladas anuales a tres millones de toneladas será un proceso largo que, si bien culminará el 2013 --según explicó Gerdau Johannpeter-- tendrá sus primeros resultados el próximo año, cuando la planta siderúrgica de Chimbote incremente su producción a 675.000 toneladas. Esta primera etapa de modernización, que tendrá un costo de US$122 millones, también prevé mejoras de las condiciones en el proceso productivo y la protección del medio ambiente.Solo estas mejoras, afirma Gerdau, ya superan el compromiso de inversiones pactado con el Estado tras la adquisición de la empresa siderúrgica nacional.