Aunque el Ejecutivo minimizó el eco que pueda tener en el Congreso la propuesta de un sector de la oposición de frenar la implementación del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, la ministra de Comercio Exterior, Mercedes Aráoz, fue más allá y consideró que esa intención responde a una consigna política.Hay una oposición constructiva, pero otra que es oportunista con una consigna política que no ve la necesidad de dar mejores servicios a la población a través del sector público como proponen las reformas planteadas, acusó.Sin embargo, la ministra cree que esa pretensión no prosperará porque la oposición constructiva se dará cuenta de los decretos que debe admitir para favorecer la implementación del acuerdo y el establecimiento de una agenda interna de desarrollo.