No es clarividente ni hace gala de pitonisa, pero el Poder Ejecutivo no le ve futuro a la pretensión de un sector de la oposición en el Congreso de frenar, vía derogatoria de decretos, la implementación del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos.Según el primer ministro Jorge del Castillo, la iniciativa de la opositora bancada Bloque Popular no tiene ninguna posibilidad de éxito en el Parlamento porque representa la antimodernidad y el salto atrás para el Perú.Sin embargo, el jefe del gabinete ministerial no dejó pasar la oportunidad y arremetió contra aquellos legisladores que son enemigos del libre comercio en general, al señalar que no creen en las reglas del mercado y plantean una corriente del pensamiento político en el Perú que quedó fuera de lugar en los años 70 y 80.