La contaminación generada en la ciudad metalúrgica de La Oroya es tal, que ya se ha extendido hasta la provincia de Concepción, ubicada a 120 kilómetros de distancia, en pleno corazón del valle del Mantaro. Así lo determinaron estudios realizados por expertos estadounidenses a iniciativa del Arzobispado de Huancayo con la ayuda de Cáritas de Alemania y el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos de América.El estudio, dirigido por el médico Fernando Serrano, de la División de Salud Ambiental de la Saint Louis University (Missouri), contempló la toma de muestras de sangre y orina de 112 pobladores de La Concepción. En la provincia, además, se recogieron muestras de agua, polvo y aire.