La tubería que transporta el gas natural de Camisea a Lima se encuentra al tope de su capacidad y, por tal motivo, no abastece en su totalidad a las plantas termoeléctricas que utilizan este recurso. Según estimados del Ministerio de Energía y Minas (MEM), se está dejando de atender 220 megavatios que abastecerían a una ciudad del tamaño de Huancayo. La situación se agrava al ser este un año seco (sin lluvias). Con esto, las plantas hidroeléctricas no pueden producir mucha energía y las térmicas a gas natural son las primeras llamadas a suplir esta carencia; de no hacerlo se utilizarán plantas térmicas a diésel, lo que ocasionaría un alza de tarifas. Voceros del ministerio informaron a El Comercio que, ante esta situación, el Gobierno solicitará a Perú LNG que disponga una parte del ducto que construye --para transportar gas natural hacia la costa-- para reforzar la capacidad de la tubería actual de Camisea, administrada por Transportadora de Gas del Perú (TGP). El objetivo de Perú LNG es alimentar la planta desde la cual exportará gas natural licuefacción a México, mientras que el Gobierno espera que la nueva infraestructura también surta a las termoeléctricas.(Edición sábado).