Se estima que en el Perú circulan unos siete millones de balones de Gas Licuado de Petróleo (GLP), tres millones de los cuales se encuentran en mal estado, porque tienen una antigüedad mayor a los 30 años o porque sus válvulas no han sido renovadas, lo que pone en riesgo la vida y salud de los usuarios.Según un estudio de Osinergmin, el 77% de los balones en libras que está en el mercado local no pasaría la prueba hidrostática, indispensable evaluación para verificar su buen funcionamiento.El Ministerio de Energía y Minas considera urgente la renovación de los balones de GLP, para seguridad de los consumidores, en especial de las amas de casa, que los manipulan con mayor frecuencia en la cocina.En el país existen dos tipos de balones de GLP: los que su peso se mide en libras -balones en libras-, con más de 30 ó 40 años en el mercado, carentes de signos para identificarlos y, por ello, difíciles de controlar; y los balones en kilogramos, que las envasadoras introdujeron en el mercado a partir de 1994, con signos distintivos que hacen fácil su identificación y, por tanto, permiten hacerles un adecuado seguimiento y control.Es necesario renovar la peligrosa dotación de balones en libras, retirarlos de circulación y que cada empresa envasadora los sustituya por balones en kilos, que además de ser más seguros poseen mecanismos para identificarlos, señala la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía.