La futura alza de las tarifas eléctricas pudo haberse evitado, si tanto el gobierno como la operadora del ducto de Camisea (TGP) hubieran planificado con anticipación la ampliación del gasoducto principal, criticaron diversos especialistas consultados por La Répública.A inicios de la semana, el gobierno anunció para octubre un alza en las distintas tarifas eléctricas -calculada entre 3 a 3.5%- tanto para los usuarios industriales, comerciales y residenciales. Para satisfacer la creciente demanda eléctrica una mayor cantidad de generadoras a diésel entrarán a operar, pues las que usan gas no recibirán mayor abastecimiento debido al límite de capacidad del gasoducto.Aurelio Ochoa, especialista en temas energéticos, indicó que el Ministerio de Energía y Minas (MEM) ya conocía un año antes las proyecciones de mayor demanda por gas natural, por lo que pudo presionar a la Transportadora de Gas del Perú (TGP) para que amplíe el ducto con anterioridad y no recién el próximo año.