El abogado penalista Mario Amoretti indicó ayer que la grabación clandestina que el congresista Gustavo Espinoza hiciera de la conversación sostenida la semana pasada con su colega Carlos Torres Caro en el domicilio del legislador Javier Velásquez Quesquén configuraría el delito de violación a la intimidad, el cual está penado con dos años de cárcel.Amoretti agregó que habría que establecer si el diálogo entre estos dos parlamentarios --difundido ayer por este Diario--puede tipificarse como un hecho delictivo, en vista de que Torres Caro trata de convencer a Espinoza de que hay que pensar en los intereses personales antes que en los del país.La calificación de si hubo o no delito dependerá de la Comisión de Ética Parlamentaria, cuyos integrantes se reunirán esta mañana para tal cometido, y buscará determinar la falta ética que ambos habrían cometido.