La filial energética de la empresa textilera Sudamericana de Fibras, SDF Energía, se encuentra en un difícil trance luego de haber empezado a construir una planta de cogeneración eléctrica (generación de electricidad aprovechando el vapor del proceso industrial) en la que invierte US$36 millones, pero que quedaría paralizada porque hasta el momento no ha logrado asegurar su abastecimiento de gas natural con la distribuidora Cálidda. Según el director gerente de esta empresa, Enrique Gubbins, la planta estaría parada por la actitud discriminatoria de la distribuidora de no garantizarles el suministro de gas natural a una presión de 32 bares (unidad de presión), que es la necesaria para su funcionamiento. Indicó que Cálidda sí lo hace con la planta termoeléctrica de Ventanilla (Edegel). Además, señaló que el suministro a 32 bares está en el contrato que tiene Cálidda con el Estado, el cual --según Gubbins-- esa empresa lo estaría incumpliendo. La planta generaría 60 megavatios (Mw), de los cuales 4 Mw servirían para su abastecimiento interno y el resto para vender al sistema eléctrico. (Edición sábado).