La larga jornada que determinaría la suerte de la alcaldesa del Cusco, Marina Sequeiros Montesinos, se inició ayer a las 2:00 p.m. en el salón municipal Iván Pérez Ruibal. Trece regidores asistieron a la sesión que estuvo abocada a determinar los vínculos de Irma Meza Sequeiros y Judith Kenty Blanco, trabajadoras de la Oficina de Boleto Turístico del Cusco (OFEC), una entidad que estaría bajo la administración del concejo con la autoridad edilicia. El objetivo de la oposición era probar que ambas mujeres eran familiares de la burgomaestre, lo que confirmaría la denuncia de nepotismo hecha pública el pasado 25 de mayo. Por su parte, los abogados de la alcaldesa cusqueña pidieron que la denuncia fuera declarada infundada por falta de pruebas y porque el documento de identidad del denunciante, Hernán Mejía, había caducado.(Edición sábado).