No ha pasado desapercibido que en su último Reporte de Inflación el Banco Central (BCR) ponga más énfasis en el fuerte incremento de la demanda interna como uno de los factores que presionan los precios internos (el otro sigue siendo el alza de los precios internacionales de los alimentos y el petróleo) y que han llevado a la inflación a una tasa anual de 5.5%. También le preocupa el alto crecimiento del gasto público (la inversión pública creció 76.4% en el primer trimestre).Por ello no extraña que en el programa monetario de junio el BCR elevó una vez más su tasa de interés de referencia a 5.75% (la quinta vez desde julio del 2007, aparte de los aumentos en los encajes), ya que el objetivo obvio es frenar el crecimiento de la demanda interna (15.2% en abril) que está llevando a un crecimiento del PBI (más de 10% anual en los primeros cuatro meses) muy por encima de su potencial (7.5%, según el BCR).Sin embargo, consideramos que este incremento de la tasa de interés, así como las demás medidas tomadas por el BCRP, podrían no ser suficientes. Primero, porque al parecer no han contenido el crédito al sector productivo (a mayo viene creciendo 41% y más de 30% anual en soles y dólares, respectivamente). De otro lado, las expectativas inflacionarias de los agentes económicos siguen en alza